¿Qué es lo que ha hecho?
Por un lado estaba el dragón negro que había tratado de esconderse en el camino superior, por otro lado estaba el hombre de las cicatrices que se había quedado petrificado pensando que todo era un sueño y en el otro lado estaba el joven monje sosteniendo la cola de alguien más mientras miraba hacia el precipicio… Esta escena resultaba estar balanceada en sus tres puntos, como si fuera una pintura perfecta.
Por un momento, nadie se movió.
El momento pareció extenderse para siempre y, después de lo que se sintió como cien años, el hombre de la cara con cicatrices fue el primero en moverse…
Sus ojos se giraron lentamente, levantó la cabeza aturdido y se quedó mirando la pared irregular de la montaña por un largo tiempo. No había ningún ser viviente arriba de su cabeza, sólo podía ver la densa nieve y el cielo sombrío. Pensó en lo que acababa de ver, algo que iba de delgado a grueso, con densas escamas y parecía que había algo más…
De todos modos, no podía recordarlo, una cosa que no sabía que era, que había estado columpiándose un par de veces de un lado a otro enfrente de sus ojos y que incluso había estado a punto de golpearlo en el rostro.
Sin embargo, una cosa tan grande, ¿cómo era posible que desapareciera en un instante?
“Líder, ¿por qué se detuvo? ¿El caballo está causando problemas de nuevo?” La cortina del primer carruaje se levantó y alguien se asomó para preguntar.
Sólo en ese momento el hombre de las cicatrices recuperó sus sentidos, sacudió la cabeza con brusquedad, desterrando la extraña experiencia de su mente y pensó. ‘Ha de ser porque llevo mucho tiempo en el camino, tengo sueño y estoy un poco confundido.’
Pensándolo de esa manera, levantó la jarra de vino que tenía al lado y tomó un trago. Este vino no era como el que se producía al sur del Río Yangtze, sino más bien parecía ser del norte, era fuerte y espeso, con un sólo sorbo el calor alcanzaba el corazón. En cuanto le dio el primer trago, sus pies y manos entraron en calor inmediatamente, y el entusiasmo regresó a su cabeza.
“Uaaah…”[1] El hombre de las cicatrices levantó la cabeza y miró a su alrededor, luego se limpió los labios y le indicó al caballo que comenzara a avanzar.
El sonido de los pasos de los caballos se escuchó de nuevo y se dispersó por el camino de montaña. Conforme se iba alejando, el dragón negro, que estaba recostado en el camino superior, volteó los ojos e inhaló por un largo tiempo.
La respiración de un dragón no era tan insignificante como la de una persona normal, fácilmente podía causar ventarrones en las montañas. Para poder encubrir su presencia y dejar que el hombre de las cicatrices disipara todas sus dudas, Xue Xian había estado conteniendo el aliento hasta ese momento, no había respirado en lo absoluto por un largo tiempo y casi se muere de asfixia.
El momento crítico había pasado y el ancestro recobró su vitalidad, como si el que estuviera varado a la mitad del camino de montaña no fuera él.
Se inclinó, mirando condescendientemente a Xuan Min que estaba parado al lado de su cola y le dijo burlonamente. “Ves, de todas maneras tuve que salir para arreglar la situación por ti, si no fuera por mi respuesta en el momento preciso, el hombre de las cicatrices hubiera quedado cara a cara con su propio cadáver.”
¡Qué gran descarado!
“…” Originalmente, Xuan Min pretendía ayudarlo a acomodar su cola, pero al escuchar sus palabras, detuvo su mano en ese momento y se enderezó de nuevo.
No dijo una sola palabra, sólo permaneció sosteniendo la cola puntiaguda y mirando a Xue Xian con frialdad, como si estuviera pensando. ‘Vuelve a decirlo, yo te escucho.’
Cuando Xue Xian lo vio, no podía esperar a comerse su propia cola. ‘Esta maldita cosa estorbosa ha sido pellizcada por este burro calvo desde que me encogí y, ahora que he regresado a mi forma original, aun así no puedo escaparme de las garras del burro calvo, ¿para qué la quieres? ¿Eh?’
Se quedó mirando fijamente a Xuan Min y, mientras mantenía su cola agarrada, Xuan Min levantó sus ojos para mirarlo, ninguno de los dos dispuesto a arrepentirse o ceder, obviamente esperando no perder su orgullo contra el otro.
La cola, que estaba siendo apretada por Xuan Min, no sólo era un órgano vital de su cuerpo, sino que era algo que lo hacía sentir avergonzado.
Por lo que, después del momento en que se encararon, Xue Xian soltó un Tsk de mala gana y cedió. “De acuerdo, de acuerdo, de acuerdo ¡eres increíble!”
Xuan Min le preguntó con tranquilidad. “¿Quién se hizo cargo de la situación?”
“…” Xue Xian volteó los ojos y habló con un tono de voz lento y monótono. “Tú… tú te hiciste cargo, ¿está bien? Ya es suficiente, ¡suéltame!”
Cuando Xuan Min escuchó sus palabras, se inclinó ligeramente y soltó su cola, acomodando la punta de la cola de esa criatura malvada y desobediente en el suelo.
Xue Xian sólo sentía que si continuaba conviviendo con este burro calvo por mucho tiempo, la duración de su vida se acortaría considerablemente.
Las dos personas habían perdido un poco de tiempo debido a su confrontación innecesaria y luego esperando a que Xue Xian, aprovechándose de la forma irregular de la montaña, regresara a su forma humana y se vistiera. Cuando regresó al carruaje con la ayuda de Xuan Min, la caravana ya había alcanzado el camino al píe de la montaña y se acercaba poco a poco al distrito.
El cielo se estaba obscureciendo más y más, probablemente ya era de noche.
“Ya casi anochece, ¿cuánto tiempo más falta para llegar a la ciudad?” El cantero Zhang se asomó por la ventana, no parecía haber ningún peligro en el exterior y en realidad no habían sufrido de ninguna manera, pero él realmente no quería pasar más tiempo en este carruaje fantasma. Entre más rápido llegaran a su destino, más rápido se separarían de esas personas.
“Ya casi.” Jiang Shining apuntó a la nieve acumulada en el camino afuera del carruaje. “Podrías caminar por este camino, ve como las marcas de ruedas son más delgadas, obviamente no estamos muy lejos de la ciudad.”
El cantero fijó su mirada ausente sobre el saco de tela que contenía comida seca, tragó saliva, se abrazó la panza que gruñía y preguntó con amargura. “¿Podríamos tomar un descanso cuando entremos a la ciudad? Conseguir un poco de comida o algo, tengo tanta hambre que no puedo controlar mi miedo.”
En cuanto terminó de hablar, el estómago de Lù Nianqi, que estaba sentado a su lado, también gruñó con fuerza.
“¿Tú también tienes hambre?” Jiang Shining le preguntó.
Lù Nianqi aún tenía el temperamento de un joven y probablemente sentía que la respuesta de su cuerpo era muy vergonzosa, por lo que bajó los ojos y respondió de mala gana. “No, yo no.” Justo cuando dijo eso, su tono de voz era frío y obcecado, pero sus orejas estaban completamente enrojecidas.
Xue Xian movió sus hombros y dijo con pereza. “Esta nevada no va a detenerse pronto, me fijé en el color del cielo hace rato y es probable que en la noche se vuelva peor. De todos modos, aunque la caravana avanza lento, no estamos muy lejos.”
La persona que era más difícil de complacer había hablado y lo que decía parecía certero.
En cuanto a la última persona…
Jiang Shining y los demás miraron a Xuan Min, se dieron cuenta de que no tenía la mínima intención de hablar, por lo que era casi como si aceptara tácitamente.
Después de media hora aproximadamente, la velocidad de la caravana iba disminuyendo más y más, y una voz ligeramente desentonada se escuchó sutilmente.
“¡Llegamos!” El cantero Zhang se talló las manos con emoción y parecía una enorme mosca panzona.
La ciudad por la que estaban pasando se llamaba Distrito Huazhi[2], porque estaba cerca del río y cerca del Paso Guan Yin. Aunque estaba a las afueras de la Prefectura Anqing, era una ciudad bastante animada, es sólo que esta ciudad era extremadamente pequeña, se requería máximo de una hora para rodearla de un lado a otro. Sin embargo, incluso en una ciudad tan pequeña, aún había algunas reglas para entrar y salir por la puerta de la ciudad.
Xue Xian ya había estado en este lugar antes y, si recordaba correctamente, la ciudad Huazhi siempre era muy estricta con las personas que pretendían ingresar. Bajarse del caballo y llegar caminando a la puerta era de los requerimientos más simples, tanto si sólo iban de paso como si quisieran pasar unos días. Además, todas las personas que eran originarias de otro lugar, debían registrar sus datos en una lista al entrar y salir de la ciudad.
Ciertamente, después de unas pocas preguntas, la caravana se detuvo en frente de las puertas de la ciudad. Un guardia que sostenía una lista de papel, comenzó a contar el número de personas al interior de cada uno de los carruajes.
Tocó a la puerta del carruaje donde estaban Xue Xian y los demás, asomó la cabeza al interior para comenzar a inspeccionarlos y la expresión de todos se volvió un poco extraña en un instante…
Vieron que el guardia tenía un menjurje negro y denso embarrado en una de sus mejillas y en el dorso de una de sus manos, que exudaba un olor indescriptible.
Respecto a ese menjurje un poco desagradable, incluso parecía que el guardia se sentía incómodo y se apresuró a limpiarse. Sólo miró a Xuan Min un par de veces más, luego cerró la puerta del carruaje y les indicó que avanzaran al interior de la ciudad.
“¿Por qué se quedó mirando fijo al maestro?” Jiang Shining se preguntó.
“Quien sabe, tal vez no luce como una buena persona.” Xue Xian parecía estar muy interesado en el paisaje afuera del carruaje, mirando con atención por la ventana, mientras respondía casualmente sin mirar hacia atrás.
Todos. “…” La persona más confiable dentro de ese carruaje era Xuan Min y aun así, ese ancestro había hablado de esa manera tan desvergonzada.
El hombre con cicatrices y sus acompañantes eran realmente bondadosos después de todo, se aseguraron de dejar a Xue Xian y a los demás en la puerta de una posada antes de despedirse y seguir su propio camino.
La compañía de teatro parecía tener prisa y no querían perder más tiempo, por lo que naturalmente no tenían planes de quedarse en esa ciudad.
“Si quieren rentar un carruaje, sólo pídanselo al dueño de la posada. Huazhi es una ciudad pequeña, una viga de una casa se cayó y mató a cinco personas, él estaba relacionado con tres de ellos. El dueño tiene los contactos para ayudarles a conseguir un carruaje, sólo gasten un poco en la posada.” El hombre de las cicatrices les dio las indicaciones antes de marcharse.
Naturalmente, Xue Xian y los demás no los dejarían marchar sin pagarles el viaje.
Sin embargo, todos los integrantes de la compañía teatral tenían un temperamento extraño y no aceptaron el dinero, no era como que no fueran a recaudar dinero en su representaciones teatrales, ¿entonces para que necesitaban aceptar este dinero? Jiang Shining, que era el único del grupo lo suficientemente civilizado para comunicarse con otros, negoció una y otra vez con ellos por un largo tiempo, pero al final falló en persuadirlos de que aceptaran el dinero, lo que lo hacía sentir un poco indefenso.
Al final, Lù Nianqi dijo con voz queda. “Deja de pelearte, siempre podemos pagárselos en el futuro.”
Cuando dijo eso, sus dedos tocaron las ramas de madera y su expresión se tornó un poco inexplicable.
“¿Tú… que percibiste?”
Lù Nianqi se quedó callado por un momento y luego dijo. “En resumen, no es probable que les debamos.”
Si Xue Xian no podía más que sospechar de lo que ese pequeño niño acababa de decir, mucho menos Jiang Shining. La compañía de teatro se despidió y se alejó en la dirección a las puertas de la ciudad, desapareciendo rápidamente en la obscuridad de la noche.
Aún después de que se sentaron en el primer piso de la posada, planeando ordenar vino y comida para calentar sus cuerpos, la atención de Xue Xian permanecía en la calle de afuera.
“¿Qué estás viendo?” Jiang Shining le preguntó con extrañeza.
“Estoy viendo mucho. He estado aquí antes, esta ciudad no esta tan animada como solía serlo, hay muchas menos personas y… hay letreros colgados en la puerta de cada casa, ¿los vieron?” Xue Xian les dijo.
“¿Qué dicen los letreros? Déjame ir a ver.” El cantero Zhang era una persona que no podía permanecer quieta y cuando escuchó eso, salió corriendo por la puerta de la posada, después de un corto tiempo regresó aferrándose a sus ropas. Los demás estaban sentados en un lugar discreto, escondidos detrás de una columna pintada de rojo, por lo que no pudieron ver sus acciones claramente.
“No sé si el contenido del letrero se puede mostrar, sólo tomé uno que se había caído de un muro cerca de aquí.” El cantero Zhang sacó el pedazo de papel de su manga y lo alisó sobre la mesa. “Miren…”
No había luz en el exterior y el cantero no había podido ver claramente lo que estaba pintado en el papel. Ahora, cuando lo alisó, todos los de la mesa se quedaron pasmados y luego, todos miraron a Xuan Min.
“Maestro, esto…” El cantero tartamudeó. “¿Por qué el gobierno anda detrás de usted? ¿Qué… qué es lo que ha hecho?”
Xuan Min también frunció las cejas y miró el retrato de la orden de búsqueda con atención.
“Cuando estábamos en Ningyang anteriormente, ¿no confundió el gobernador Liu también a la persona del retrato con el maestro?” Jiang Shining preguntó con incertidumbre. “¿No es esta situación igual?”
Xue Xian levantó la mano, tocó el papel y luego dijo. “Me fijé claramente en el retrato de Ningyang y, a excepción de que la persona del retrato también era un monje y tenía un lunar en el costado del cuello, no se parecía en nada a este burro calvo. Además, la persona del retrato era mucho más vieja que el burro calvo.”
Sin embargo, encontrarse ese papel ahora…
“Las de órdenes de arresto en Ningyang llevaban mucho tiempo a la intemperie y estaban casi destruidas, ¿cierto?” Xue Xian agitó el papel. “Este se siente… como si lo hubieran puesto hace sólo unos días.”
Además, el retrato de esta orden había sido ligeramente modificado en comparación con los de Ningyang, haciendo que la persona luciera un poco más joven y sus rasgos faciales también fueron afinados. Parecía que… se asemejaba un poco más a Xuan Min.
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